El Gobierno nacional anunció que
atenderá a los comercios afectados por las acciones vandálicas
registradas en el estado Bolívar el pasado fin de semana, cuando estaba
en marcha en todo el país una operación financiera del Estado para
golpear a mafias que depreciaban y contrabandeaban el billete de 100
bolívares, como parte de un sabotaje internacional a la economía
venezolana.
Los actos de vandalismo fueron
registrados principalmente en las poblaciones del sur del estado como
Guasipati, El Callao y Tumeremo, pero el sábado se extendió hacia la
capital Ciudad Bolívar y continuó el domingo.
Los grupos vandálicos abrieron negocios y
locales comerciales, entraron y cargaron con varios productos, muchos
de ellos no eran alimentos. El gobernador de la entidad, Francisco
Rangel Gómez, dijo que en total fueron atacados más de 300 comercios ,
entre ellos 20 licorerías, cuatro ferreterías y ocho agencias de
lotería. También fueron quemados tres vehículos y robaron ventas de
caucho.
“Esto demuestra que no se trata de una
necesidad de adquirir alimentos”, dijo el ministro de Relaciones
Interiores, Justicia y Paz, Nestor Reverol, quien informó que fueron
detenidas 286 personas, 30 de ellos con antecedentes penales. Además
fueron detenidos dos efectivos policiales del estado que participaron en
los hechos.
Algunos comercios propiedad de
ciudadanos asiáticos fueron atacados durante las acciones de violencia.
El Gobierno nacional prepara un despacho de numerosas gandolas con
productos para reponer los inventarios sustraídos, y que debían
abastecer la entidad durante este mes.
El ministro Reverol informó que por
orden del presidente, Nicolás Maduro, los comerciantes afectados
recibirán todo el apoyo necesario del Estado para la recuperación
progresiva de sus negocios.
En lo inmediato, los propietarios de
comercios afectados recibirán créditos de la banca pública, y la
infraestructura dañada será reparada mediante la Gran Misión Barrio
Nuevo Barrio Tricolor.
Las autoridades investigan si los actos
de vandalismo guardan relación con los incendios de las agencias de los
Bancos Bicentenario y Venezuela en Guasdualito, Apure, donde por esos
hechos fueron capturados miembros de los partidos Voluntad Popular y
Primero Justicia, ambos de extrema derecha y con precedentes públicos
del uso de la violencia como forma de hacer política.
“Estamos identificando a los líderes y a
quienes tienen participación directa, para aplicarle el máximo castigo”
dijo el ministro Reverol sobre el vandalismo en Bolívar que coincidió
con otros hechos violentos registrado también el sábado en el municipio
La Fría, Táchira, donde hubo algunos focos de violencia.
La Fiscalía General de la República
comisionó a dos fiscales para investigar la muerte durante los hechos de
tres personas, específicamente en la población de La Paragua. Los tres
fallecidos fueron abaleados “durante una situación irregular” reportó el
Ministerio Público en un despacho de prensa.
Los planes de seguridad ciudadana fueron
reforzados en la entidad oriental donde fue instalado un Estado Mayor
para el control interno que incluye un despliegue de más de dos mil
efectivos militares y policiales.
La policía regional fue intervenida y
además fue activado un plan especial para normalizar el suministro de
combustible, afectado ante el destrozo de tres bombas de gasolina por
parte de los grupos violentos.
Los hechos sucedieron seis meses después
de que en Cumána, estado Sucre (también al oriente del país) se
registraron actos vandálicos con similares daños a ferreterías, ópticas,
zapaterías, tiendas de ropa y guarderías, aunque medios privados
trataron de asociarlo con saqueo de alimentos. Esa vez fueron apresados
400 ciudadanos involucrados en los hechos.
AVN
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